Slow Travel: 5 lugares de Menorca donde desconectar
En los últimos años un nuevo movimiento ha surgido (y con fuerza) en el sector turístico: el slow travel. Viajar siempre es un placer, pero sus beneficios, satisfacciones y bondades se multiplican si se practica sin prisas, sin tener que mirar el reloj cada media hora y sin tener que acatar estrictos horarios para «intentar» ver el mayor número de monumentos posibles. En Menorca se viaja sin estrés y evitando aglomeraciones innecesarias. Así que apaga el móvil y quítate el reloj porque tenemos 5 lugares de Menorca donde desconectar y dejarse llevar.
Un pueblo: Fornells
Aunque los municipios con más habitantes de Menorca son Mahón y Ciudadela (con algo más de 28.000 nombres registrados en cada uno de sus censos), esta ruta debe comenzar en uno de esos encantadores pueblecitos de pescadores donde el tiempo parece detenerse y transcurre lento y sin agobios. Situado al norte de la isla, y con apenas mil vecinos, Fornells cuenta con un maravilloso puerto rodeado de casas blancas y repleto de barquitos de pesca. En ellos llegan las deliciosas langostas con las que se prepara su receta estrella, la caldereta de langosta. Y aunque la bahía de Fornells es la segunda más grande de la isla, el encanto que desprende y la paz que habita en ella son disfrutados por propios y extraños.
Un parque: S’Albufuera des Grau
Calma y sosiego -más que personas- es lo que encontrarás en el que es el parque natural más importante de Menorca; un espacio protegido desde finales del siglo pasado donde habitan cientos de especies animales y vegetales repartidas entre sus más de 5.000 hectáreas y en el que se han creado tres rutas diferentes para poder visitarlo. El parque en sí engloba la albufera y su laguna, el cabo de Favàritx (donde se halla el faro homónimo) y la isla de Colom, a la que podrás acercarte en barca desde la costa en una tranquila y agradable travesía. A destacar también que la playa de Es Grau es una de las menos masificadas de toda la isla.
Una bodega: Binifadet
El placer de degustar un buen caldo está reñido con las prisas y el ajetreo de las grandes urbes. En Binifadet, una bodega situada en Sant Lluis, podrás pasear entre viñedos que son la expresión natural de la personalidad menorquina. La familia Anglés, propietaria de la bodega, organiza también visita a sus instalaciones para entender todas las fases por las que pasan sus vinos. Se nos antoja uno de los mejores lugares de Menorca donde desconectar y hacer que el tiempo se detenga.
Un tesoro natural: el mar Mediterráneo
Aguas en calma, a una temperatura envidiable y tan cristalinas como en tus mejores sueños hacen del mar Mediterráneo un paraíso para la práctica del snorkel y el buceo, y uno de los lugares perfectos en Menorca para desconectar. La isla alberga varios arrecifes naturales a lo largo de todo su litoral (Cagaire, Punta del Bisbe, Es Cargol…), varios pecios que explorar (Santa Clara, Malakoff) y una Reserva Marina al norte delimitada por la bahía de Fornells y el cabo Gros. Así que coge tu equipo de buceo (o alquílalo en Diving Menorca si no dispones de uno), sumérgete y experimenta la paz que los fondos marinos te regalarán. ¡Repetirás una y mil veces más!
Y dos librerías: La Torre de Papel y Espai 14
Seguro que las ganas de viajar hasta Menorca para encontrar un remanso de paz han aumentado tras la lectura de estas líneas, por lo que nuestra última recomendación pasa por el mejor lugar del mundo para continuar viajando, para seguir soñando con calma, a la velocidad que marquen nuestros biorritmos y lejos de abarrotados locales donde encontrar un hueco libre es misión imposible. ¿Qué te parece si nos acercamos a una librería? Te recomendamos dos referencias: La Torre de Papel, en Ciutadella, y Espai 14, en Mahón; porque las librerías también son lugares donde estar sin prisas, donde refugiarse, donde esconderse y donde perderse para no ser encontrados.
A estos lugares que hacen de Menorca un auténtico paraíso para los amantes del slow travel les podríamos añadir un spa, un monte, una cala, una iglesia, un faro, una ruta… ¿Cuál sería tu aportación a esta lista de sitios donde el silencio y la calma son los auténticos protagonistas?