¿Nos vamos de picnic? La isla de Mallorca cuenta con más de 30 instalaciones que facilitan esta práctica. Áreas recreativas dotadas de mesas, bancos, fogones y parrillas (muchas veces con parques infantiles incluidos) de las que se puede disfrutar fuera de la temporada de verano, desde el 15 de octubre hasta el 1 de mayo. Cerca de Palma, en el interior o pegados a la costa, destacamos aquí algunos de los mejores lugares para disfrutar de un día de picnic en Mallorca.
Parque Natural de Mondragó
Está situado en el este de Mallorca, en el municipio de Santanyí, cerca de esas calas de arena blanca y aguas transparentes (una de ellas, la propia Cala Mondragó) que caracterizan a la zona. Declarado parque natural en 1992, cuenta con 15 mesas con sus correspondientes bancos, puntos de agua no potable y servicios; todo ello repartido en su dos zonas habilitadas para el picnic: una en Sa Font de n’Alis y otra en la Cala de S’Amarador. Desde los merenderos se puede acceder a los diversos itinerarios de senderismo que recorren las 750 hectáreas del parque, en el que se encuentran bosques de pinar y acebuche, zonas de savina litoral -típica de Baleares- o el propio estanque de agua dulce de S’Amarador.
Area recreativa de Son Tries
Enclavada en la finca pública de idéntico nombre, muy cerca de la Urbanización Es Verger, en la localidad de Esporles, cuenta con una amplia zona de mesas y bancos, 10 barbacoas de piedra, WC químico y parking con plazas destinadas a minusválidos. Está especialmente indicada para familias con niños dado que tiene también un parque infantil. Muy cerca se encuentra una famosa fuente mallorquina: Sa Font de Dalt. También se puede acceder a un mirador cercano desde el que se divisa el pueblo de Esporles. Todos los ingredientes para disfrutar a la perfección de un día de picnic en Mallorca.
Área recreativa Monasteri de Lluc
Situada entre ca S’Amitger y Font Cuberta, en pleno Santuario de Lluc, es un lugar tranquilo con un buen número de mesas y bancos, fuente de agua potable y dos zonas de juegos para los niños. Posee grandes aparcamientos y acceso para minusválidos. Los responsables del área suelen proporcionar sin problema leña de forma gratuita a los que deseen utilizar sus fogones. En las inmediaciones existen dos zonas de acampada. Por supuesto, se puede acceder a la basílica (de forma gratuita) de estilo renacentista. En el santuario se encuentra además un museo y se puede realizar un agradable paseo (de una media hora) hasta el Monte del Rosario, para bajar la comida.
Puig de Maria
Otro santuario, en este caso en el término municipal de Pollença, al que se accede tras un agradable paseo de unos 15 minutos desde la carretera. Dispone de todos los servicios, e incluso hay carbón y leña disponibles por un módico precio. Existe servicio de bar y restaurante e incluso la posibilidad de hospedaje. Se puede visitar la ermita, cuyo origen se remonta al siglo XIV; y las vistas desde la zona son absolutamente espectaculares.
Can Picafort
Can Picafort, en Santa Margalida, cuenta también con una zona recreativa perfecta para pasar un día de picnic en Mallorca. Una zona amplia, con veinte fogones a disposición de los visitantes, además de servicios y parque infantil. Se trata de un excelente punto de partida para visitar lugares como la necrópolis de Son Real, las playas de Muro o los amplios arenales de la Bahía de Alcúdia.
Además de estas cinco zonas especialmente destacables podemos recomendar las instalaciones de La Victoria (en Alcudia, y con un refugio público para seis personas); el área recreativa de Cas Garriguer en Bunyola, muy cerca de Palma; el Merendero de Caubet en la carretera de Sóller, a tan solo 10 kilómetros de la capital; el situado en la ermita de Nostra Senyora de la Consolació de Sant Joan; el área recreativa de Llubí, en el entorno de otra ermita, en este caso la de Sant Crist; o Son Moragues, situada en una finca pública del término municipal de Valldemosa: un área de recreo muy completa con merendero, baños, zona de barbacoas y refugio, aunque no cuenta con agua potable.
¿Apetece? Seguro que sí. Solo podemos añadir que no debemos olvidar dejar el entorno natural en el que disfrutemos de un día de picnic en Mallorca exactamente igual que nos lo encontramos para poder seguir disfrutando de estas instalaciones durante mucho tiempo.