¿Eres un alma solitaria? ¿Estás viviendo una segunda luna de miel (o la primera)? ¿Has formado una familia, quizá, numerosa? Sea cual sea tu caso, Mallorca se adapta a tu estilo de vida y al de tu entorno. He aquí unas cuantas pistas para que viajar a Mallorca solo, en pareja o en familia no suponga ningún quebradero de cabeza.
Yo, mi, me, conmigo
Está comprobado que el ocio a solas no tiene por qué ser menos entretenido que cuando disfrutamos de planes en compañía; de hecho, son muchas las razones para lanzarse a viajar en solitario. Aprovecha esas vacaciones para darte el lujo de estar contigo mismo y organizar planes que se ajusten 100% a tus gustos. ¿Qué tal si comienzas a caminar por el centro de Palma y descubres algunos de los maravillosos patios que pueblan sus laberínticas calles? A lo largo del paseo podrás detenerte a tomar un café con calma en referencias míticas de la ciudad como Ca’n Joan de S’Aigo, Antiquari o La Molienda, y recuperar el placer de leer en alguna de sus mesas sin que nadie te interrumpa.
Museos y galerías son también espacios donde no mirar el reloj, donde poder ir a tu ritmo y dejarte llevar por el recorrido que tus propios pasos tracen sin tener que esperar a ese amigo que se detiene en cada uno de los cuadros. Una visita con calma a Es Baluard o al Palacio Real de la Almudaina harán que disfrutes del arte de otra manera, con otra cadencia. Aunque, sin duda, si quieres dedicarte unas horas a ti mismo nada mejor que visitar un spa, algo que sólo podrás hacer si viajas solo o en pareja.
Si te apetece salir de la ciudad para que la desconexión con el mundanal ruido sea total, coge (o alquila) una bici, y bien en versión paseo, o bien en versión mountain-bike, escoge una de las espectaculares rutas que te ofrece la isla y empieza a pedalear a tu aire en el que es, sin duda, uno de los mejores lugares del mundo para disfrutar sobre dos ruedas.
Con tu media naranja
Aunque uno de los planes más románticos para hacer con tu pareja en Mallorca es recorrer alguna de las rutas por los viñedos de la isla, la ‘palma’ se la llevan sus puestas de sol. Sa Foradada, el Cabo Formentor o Ses Covetes (en Es Trenc) son algunos de esos sitios mágicos para disfrutar al calor de un buen abrazo. Y es que lo que percibimos a través del sentido de la vista siempre se potencia si estás en compañía de tu media naranja. Espectaculares son también las vistas desde los miradores de la isla; desde estas líneas os recomendamos el de Ses Ánimes o el de Es Colomer. Pero si de verdad quieres sorprender a tu pareja con algo que se le quede fijado en la retina para toda la vida, elige un viaje en globo para dos. Desde las alturas divisaréis la isla a vista de pájaro y admiraréis su belleza desde una perspectiva diferente. Y si os fijáis bien, también podréis ver alguna de las calas donde pasar una tarde romántica inolvidable.
¿Terminamos con una cena a la luz de las velas? Enamoraos de nuevo en una de estas cuatro referencias gastronómicas de Palma, Sadrassana, Simply Fosh, Basmati y Quadrat; o en una de estas cuatro opciones fuera de la capital: Sebastián y el Olivo, en Deiá; Zaranda, en Es Capdellá; y Bens d’Avall, en Sóller. Rematad la noche con unas notas de jazz, el género más evocador que existe, en Jazz Voyeur Club o el Blue Jazz Club.
Con la familia al completo
Puede que Mallorca sea la mejor de las Islas Baleares para disfrutar en familia por las infinitas posibilidades de ocio que ofrece. Los parques acuáticos son el hábitat natural de los más peques y Mallorca tiene algunos de los mejores de toda España; estos son Western Water Park, Hidropark y Aqualand. Otra opción es probar la destreza al volante de cada miembro de la familia en Karting Magaluf o en Karting Can Picafort, si estáis por el norte de la isla; o quizá comprobar la destreza con el swing de tus hijos en Golf Fantasía, un minigolf que abre hasta bien entrada la noche.
Si la bandera favorita de la familia es la pirata, en Pirates Adventure gozaréis con un auténtico festín bucanero y viajaréis juntos a una época en la que los piratas dominaban los siete mares en una asombrosa noche de entretenimiento. De hecho, son más de 3 millones los ‘grumetes’ que ya se han enrolado en este fantástico barco. Y del mar a la selva pasando por el Safari-Zoo de Malllorca o el Zoo Natura Parc, donde cada uno de vosotros podrá elegir a su animal favorito.
Y si os atrevéis con el último grito en diversión hay Escape Rooms aptas para niños a partir de 8 años (siempre que estos vayan acompañados de sus padres). Sus nombres, King of Scape, Mission Escape (con una habitación especialmente diseñada para niños entre 10 u 13 años) y Best Escape Rooms.
¡Ahora tú eres el que decide! Bien sea solo, en pareja o en familia, Mallorca está llena de jugosos planes que se adaptarán a la compañía que tengas en cada momento.